Los Tau Ceti

Humanoides muy parecidos a los caucásicos, con aire de mediterráneos o sudamericanos, de 1.65 promedio de estatura. Probablemente progresivos no intervensionistas, relacionados insistentemente con los seres de nuestra familia galáctica, así como con los de Epsilon Eridani.

Efectivamente, esta relación entre los humanoides de Tau Ceti y Epsilon Eridani con nuestra familia galáctica no es nada casual. Alguna fuente, por ejemplo, señala que así como los seres de Lyra terminaron colonizando la Tierra, también lo hicieron con esos dos sistemas que, de paso, se encuentran próximos en el espacio al sistema estelar de Las Pléyades. Si es así, y habláramos de nuestra familia galáctica colectivamente como nuestros padres o tíos, podremos considerar entonces a los habitantes de Tau Ceti y Epsilon Eridani como nuestros primos.

Recuperación de una nave de Tau Ceti estrellada en Phoenix, Arizona

En la primavera de 1991 el investigador Forest Crawford hizo pública la existencia de un proyecto especializado en la recuperación de naves extraterrestres accidentadas.

Uno de los integrantes de este proyecto, comentó la recuperación de una nave accidentada en 1961 en Phoenix, Arizona, a la que iban a trasladar al interior de una base subterránea en Dakota del Norte. El equipo de rescate ingresó a través de una base para submarinos, alcanzando los niveles inferiores de dicha base subterránea, demostrando la interconexión entre instalaciones subterráneas en ese país. Esta operación de rescate adquirió toda la envergadura de un proyecto, bautizado como OSMA.

La nave era tripulada por tres humanoides. Dos de ellos estaban muertos, pero al otro lo encontraron vivo dentro del aparato, al que entraron gracias a un resonador sónico, y bautizaron al humanoide mismo con una palabra aborigen que significa 'espíritu carente de paz'. Contamos con un sorprendente testimono 'desde adentro' de la nave misma del ex - jefe de seguridad de dichas instalaciones, quien fue el primero en entrar al disco accidentado.

En apariencia la nave estaba intacta por fuera. El interior lo describe como de una inusual suavidad, todo fundido en una sola pieza, la parte central de la nave circular y con una mesa central también de una sola pieza, sin uniones ni remaches, y con un olor parecido al pino. No olvidemos la víviva descripción de Antonio Villas Boas, de las paredes interiores de aquella nave sin uniones ni rebordes.

Lo esencial de este relato es que nos muestra al extraterrestre de Tau Ceti humanoide en todo, con excepción de dos detalles. Una nariz de romano, descrita por otras fuentes, yorejas ligeramente en punta, que deben haber inspirado la célebre apariencia del Dr. Spock en Viaje a las Estrellas.

Al principio la operación de rescate funcionó bien comandada por un oficial apellidado Turner, pero al ser relevado del mando, por desgracia el nuevo comandante hizo que se le aplicara anestesia al extraterrestre, y a pesar de haberse dado cuenta de que casi no hacía efecto, no solamente ordenó que se le practicaran todo tipo de exámenes médicos, sino también que se llevaran a cabo incluso cirugías y remoción de órganos para su trastado a laboratorio. Digamos que se comportó en forma calcada al sadismo demostrado por los supuestos investigadores nazis con los judíos de campos de concentración.

Como hubiera sido inevitable esperar, por desgracia aquel ser murió a consecuencia del tormento. Es un triste ejemplo de cómo el sanguinario ser humano es capaz de torturar a un ser de las estrellas que ha resultado herido, y se halla solo e indefenso, como sintiendo el orgullo de perpetrar también al ser del cosmos, las mismas atrocidades que son moneda corriente en nuestro planeta.

Inesperadamente, y reproduciendo la misma mecánica de comunicación establecida durante la recuperación del llamado EBE de Roswell - Corona, este miembro del equipo de rescate recibió del extraterrestre comunicación, por medio de un proceso de transferencia de ondas telepáticas - empáticas - visuales - encefalográficas.

Su tipo humanoide era no caucásico sino mesoamericano o de apariencia mediterránea, con una nariz, repito, ligeramente de mayor volúmen que nuestro promedio. Y de una musculatura también ligeramente más recia que nosotros, de lo cual dedujeron que en su astro tienen un campo gravitatorio algo más fuerte.

Encontraron también que, aunque el panel de instrumentos de la nave estaba configurado para ubicarse en los sistemas estelares de Tau Ceti y Epsilon Eridani, en realidad su origen era Tau Ceti. Si esto no confirmara que dichas civilizaciones están relacionadas, entonces por lo menos demuestra que comparten un área relativamente limítrofe.

Como producto de su comunicación con este tripulante, supo que los seres de Tau Ceti están al tanto de, y en desacuerdo con, la relación que la raza humana ha establecido con los seres de Rigel. El ser añadió que los habitantes del sistema de Tau Ceti sienten que las abducciones o secuestros llevados a cabo por los Rigelianos en contra de personas, son una gran injusticia para la humanidad. Su sentir fue : "son una raza parásita que hace lo mismo con otras civilizaciones en el universo". Alertando que esa relación establecida entre el gobierno gringo y los Rigelianos es muy peligrosa, y se halla fuera de control, entre otras cosas porque están utilizando los fluidos orgánicos, obtenidos en las mutilaciones de ganado, como alimento

Dijo que los seres de Tau Ceti fueron también presa de los Rigelianos, y trabajan hoy dia con otras culturas que igualmente han sido víctimas de ellos, confirmándole que en milenios pasados fue tan avasalladora la infestación de los grises sobre los Ets Nórdicos, que terminaron corriéndolos de su planeta.

Es muy interesante que una vez que todo aquel proyecto de recuperación de esa nave y sus tripulantes fue concluido, de todas formas este testigo continuó siendo contactado con el paso del tiempo por extraterrestres de Tau Ceti, que le han confirmado que se encuentran en contacto con nosotros para ayudar.

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